Condiciones de lavado
Aquí tienes una serie de consejos básicos útiles para el lavado y buen mantenimiento de tus prendas. A pesar de estas recomendaciones, es imprescindible que hagas caso a la etiqueta de lavado individual que tienen todos nuestros productos, ya que a veces algunos tejidos requieren de tratamientos más específicos.
PRIMER LAVADO
- Siempre recomendamos un primer lavado antes de su uso, sobre todo si se trata de productos con rizo, tales como las toallas de jacquard, terciopelo o los pareos con rizo. Este primer lavado sirve para eliminar casi en su totalidad, esa pelusilla que desprende el tejido y que se adhiere a nuestra piel cuando nos secamos por primera vez con ella.
- No utilizar suavizante, esto es esencial para poder eliminar al máximo esa pelusilla y adquirir el mayor poder de secado de la prenda. Esto es aplicable al resto de lavados, pero si te gusta poner suavizante por su olor, te recomendamos que lo apliques una vez cada tres o cuatro lavados.
- Este primer lavado puede realizarse en corto y con agua fría. Así mantendrás la intensidad de los colores durante mucho más tiempo.
- Evita mezclar colores oscuros con claros, sobre todo durante los primeros lavados. El poder de absorción de algunos tejidos como el foutà y la oscuridad de los colores de nuestras toallas jacquard, pueden ser incompatibles. Al someter algunas prendas oscuras a temperaturas de lavado de 30-40 grados, éstas pueden desprender parte de su tinte y tintar otras de colores más claros. Por eso es necesario lavarlas separadamente.
CONDICIONES GENERALES DE LAVADO *
siempre consulta tu etiqueta:
La gran mayoría de nuestras toallas, pareos y foutás pueden ser lavados a máquina a un máximo de 40 grados de temperatura. Para un mejor mantenimiento de los tejidos y sus colores, si la prenda no está excesivamente manchada o sucia, nosotros no recomendamos superar los 30 grados o incluso lavarlas en frio. Pero todas nuestras prendas marcadas con este icono, aguantan sin problema esa clase de temperaturas
Puedes planchar nuestras prendas, no uses altas temperaturas porque no es necesario y puedes quemar los tejidos, con poca temperatura y rápidas pasadas se eliminan las posibles arrugas que puedan tener los pareos o foutás. En el caso de las toallas no recomendamos el planchado, a pesar de que puedes hacerlo. Al secarse con su propio peso, adquieren la forma y la soltura del rizo adecuadas para guardar en el armario y secar perfectamente tu piel. Del mismo modo se desaconseja el planchado con vapor ya que eso humedece la toalla y puede crear malos olores tras su guardado si no está perfectamente seca
Evidentemente queda totalmente prohibido usar lejía en nuestras prendas, puesto que es innecesario y quedarán totalmente dañadas.
Puedes utilizar tu secadora para agilizar el secado de las prendas. Si sueles usar regularmente secadora, verás que el rizo de las toallas queda más suelto y esponjoso que si la tiendes al sol. Así también aumentas la vida de sus colores. Pero con cada secado, debido a la fricción y la temperatura, los hilos pierden fibras que verás acabar en el filtro de tu secadora. Por lo que es muy importante que utilices un programa de secado adecuado para cada tipo de tejido: algodón, poliéster, mezcla, viscosa… Nuestro consejo es el secado al aire libre y en sombra, sabemos que es más lento, pero es el óptimo para una vida más larga y colorida del producto.